Beneficios de la podología

Los beneficios de la podología en la tercera edad

Los beneficios de la podología geriátrica nos permiten tratar las dolencias que aparecen en los pies con el paso de los años. Es muy común que a cierta edad, aparezcan signos de desgaste y sensación de dolor en los pies. Los tratamientos de podología pueden aliviar estas patologías de manera eficaz, mejorando la calidad de vida de las personas mayores. 

En Brunimarsa disponemos de un servicio de podología a domicilio, con el que ofrecemos a nuestros mayores tratamientos personalizados.

Qué es la podología geriátrica

La podología geriátrica es la especialidad médica orientada al tratamiento de las dolencias de los pies de las personas mayores. A lo largo de los años, los pies soportan un desgaste muy elevado, las técnicas de podología geriátrica logran resolver estas patologías y prevenir las dolencias que pueden surgir en el futuro. 

Patologías comunes en personas mayores

En la mayoría de los casos, las patologías en los pies de las personas mayores vienen dadas por la disminución de la grasa plantar, que actúa como una capa protectora, y la mala circulación. Las patologías derivadas de estas causas son las siguientes:

  • Alteraciones plantares: Muchas de las alteraciones comunes surgen con la edad, otras están presentes durante toda la vida, pero se agravan con el paso del tiempo. El pie cavo o plano, los juanetes, la desviación de talón o los espolones son patologías que aparecen debido a una deformación en el pie, sus consecuencias pueden tratarse eficazmente. 
  • Piel y uñas: Las alteraciones en la piel y en las uñas también son muy comunes llegada cierta edad. Los callos, las durezas, el aumento de las uñas, las grietas y en los casos más graves, las úlceras, pueden tratarse mediante tratamientos muy eficaces e indoloros, que permiten volver a pisar con normalidad. 
  • Dedos: La mala posición de los dedos puede desembocar en patologías muy dolorosas. Es importante detectar a tiempo este tipo de casos para reducir sus consecuencias. 
  • Hidratación: En otros casos las dolencias provienen de la piel. La deshidratación provoca grietas y molestias en los pies que se pueden subsanar mediante tratamientos centrados en el aumento de la hidratación de la piel. 

Estas son algunas de las patologías más comunes, los beneficios de la podología nos permiten recuperar la salud del pie y reducir el dolor en esta zona. 

Prevención y tratamientos en el pie

Evidentemente, cada patología necesita un tratamiento personalizado, sin embargo, en la mayoría de los casos se puede actuar eficazmente sobre este tipo de dolencias mediante las siguientes técnicas terapéuticas:

  • Hidratación: Los productos hidratantes no solo van a aumentar la humectación del pie, además van a reducir los dolores derivados de la sequedad. Existen muchos productos orientados a mejorar la hidratación de la piel en personas mayores. 
  • Plantillas: El uso de plantillas es la mejor solución para casos en los que existe una alteración plantar. Mediante un diagnóstico personal, podemos determinar qué tipo de plantilla es la más adecuada para mejorar la pisada del paciente. 
  • Calzado: Existen calzados especiales para personas de la tercera edad. El objetivo es que el paciente esté cómodo y pueda realizar los apoyos sin dolor. 
  • Higiene: La higiene regular también es imprescindible para ayudar a prevenir muchas de las dolencias que aparecen en los pies con el paso del tiempo. 

¿Cuándo debo ir al podólogo?   

La mayoría de las dolencias relacionadas con los pies durante la tercera edad provienen de un deterioro que avanza con el paso del tiempo, por eso las labores de prevención y la detección temprana son la mejor solución para problemas podológicos durante la tercera edad. 

Si aparece una dolencia, independientemente de su intensidad, es imprescindible acudir al podólogo. Un dolor leve puede derivar en un problema mayor si no se trata a tiempo, por ejemplo, un picor derivado por la falta de hidratación, puede acabar convirtiéndose en una patología grave si no se trata a tiempo. 

Aunque no percibamos sensación de dolor, si aparece algún tipo de alteración, ya sea en la planta del pie o en otra zona, también será necesario acudir al podólogo. Durante la tercera edad, una patología leve puede derivar rápidamente en una dolencia más grave, por eso es importante acudir a revisiones periódicas con el objetivo de garantizar una detección temprana. 

Las ventajas de la atención podológica a domicilio 

Uno de los perjuicios de este tipo de patología es que dificulta el traslado del paciente, por eso la atención a domicilio supone una ventaja. Si el podólogo acude a domicilio a realizar un tratamiento personalizado, no será necesario trasladar al paciente. 

En el caso de las personas dependientes es aún más importante disponer de este tipo de servicios a domicilio. Las personas dependientes pueden sufrir dolencias debido a la falta de movilidad, los servicios de podología a domicilio permiten establecer soluciones adecuadas. 

Brunimarsa, todos los servicios a domicilio que necesitas

En Brunimarsa, como empresa de atención domiciliaria, te ofrecemos la posibilidad de solicitar tratamientos socio-sanitarios a domicilio para personas de la tercera edad, entre los que se incluyen tratamientos de podología. Nuestros especialistas se trasladan a domicilio, para mejorar la calidad asistencial de las personas que más nos necesitan.        

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